Los cubiertos de bioplástico son una de las respuestas a la directiva europea que, aprobada en 2019, prohíbe el uso de plástico de un solo uso para fabricar cubiertos, vasos, pajitas y platos a partir de 2021. La nueva legislación europea pretende aumentar la porción de material reciclado en estos artículos desechables y reducir su impacto medioambiental.
¿Por qué utilizar cubiertos y vasos biodegradables?
Los cubiertos, los vasos y todos los materiales desechables son muy utilizados. Debido a su durabilidad y al hecho de que pueden desecharse, resultan cómodos para muchas personas. Son precisamente estas razones que llevan a su consumo generalizado las que en realidad los convierten en su defecto en términos de impacto medioambiental.
Las vajillas clásicas de plástico, de hecho, no son biodegradables. Si tomamos como ejemplo un tenedor de este material, tardará entre 100 y 1000 años en degradarse en el suelo o en el mar. Si consideramos, pues, que sólo en Italia se utilizan cada año unas 115.000 toneladas de vajilla de plástico, podemos comprender la magnitud del impacto medioambiental que tiene este hábito tan común.
Además, si tenemos en cuenta que la materia prima para fabricar el material plástico es el petróleo, también podemos ver los recursos en términos de energía que se necesitan para fabricarlos, con el inconveniente también del aumento de la contaminación ambiental.
Se dio un gran paso al eliminar las vajillas de plástico desechables en la recogida selectiva de residuos, pero esto no es suficiente. Por eso, y también en vista de la reciente directiva europea, se han creado diversas alternativas, entre ellas los bioplásticos.
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Los Cubiertos de madera biodegradables son una de las respuestas a la directiva europea que, aprobada en 2019, prohíbe el uso de plástico de un solo uso para fabricar cubiertos, vasos, pajitas y platos a partir de 2021.