Los peces de aguas cálidas necesitan más cuidados, especialmente en términos de temperatura, para asegurar el desarrollo adecuado de su hábitat. En este artículo le ayudaremos a conocer mejor a estos animales en particular, para que pueda montar sin errores el acuario tropical con el que ha soñado durante tanto tiempo.
Cuidar de los peces de aguas cálidas
Como primer paso, estos peces necesitan un acuario específico que soporte temperaturas más altas de lo habitual. El agua debe estar siempre entre 24 y 28 grados, y puedes controlar la temperatura con un termómetro o instalar un termostato especial. De esta manera, se mantendrá más o menos constante y se evitará el riesgo de poner en peligro la salud de los peces.
Otro problema que hay que tener en cuenta es que hay algunas especies de peces de aguas cálidas que no se llevan bien con otras, debido al espacio, la alimentación o incluso a problemas de reproducción. No hace falta decir que nunca tendrás que combinar un pez tropical con un pez de agua fría, porque sus necesidades son totalmente opuestas.
Peces de agua caliente: ¿cuáles elegir?
Preste especial atención a las características de los siguientes peces de aguas cálidas en caso de que quiera montar un hermoso acuario, rico en variedades orgánicas, como el de la foto:
Tres peces payaso nadan en un acuario.
1. Pez payaso
El pez payaso, conocido popularmente como "Nemo" gracias a la película de animación Buscando a Nemo, se presenta en un color sorprendente basado en tonos naranja y rayas verticales blancas y negras. Puede crecer hasta 11 centímetros de longitud.
Es silencioso, vive hasta 10 años y se reproduce fácilmente. Necesita un acuario de al menos 200 litros, con sal y agua caliente (a una temperatura de 27ºC). No debe perderse de vista las plantas que emulan su hábitat natural para permitirles nadar, jugar y esconderse entre ellas.
2. Gurami besuqueándose
Es un pez de río que parece estar siempre enamorado o buscando a alguien a quien besar. Eso es por la forma de sus labios. Gurami smoochie vive en Tailandia y Malasia, precisamente en aguas tranquilas o estancadas con mucha vegetación y una temperatura que oscila entre los 22 y 28 grados. Es de color blanco marfil y requiere un acuario de al menos 150 centímetros.